Hoy es un día de reivindicación en donde mujeres de todo el mundo se unen, sin importar las diferencias políticas, culturales, ideológicas o de cualquier otra índole, para revalidad sus derechos.  

En cualquiera de sus múltiples roles, las mujeres se han caracterizado siempre por ser símbolos y ejemplos inquebrantables de lucha, compromiso, fortaleza, valentía, entrega y amor incondicional.

Sus huellas imborrables se proyectan en el tiempo, como heroínas en el pasado, activas protagonistas en el presente, y seguramente artífices de grandes progresos en el futuro.

Sus esfuerzos constantes, sus valientes batallas, tanto individuales como colectivas, las han convertido por derecho propio en hacedoras de la historia, conquistando grandes resultados, logrando su ascensión social y el reconocimiento de sus derechos económicos, sociales y políticos como plenas ciudadanas.

Han roto los moldes, han tomado las riendas de su destino, sabiéndose capaces no solo de forjar una familia, sino también de contribuir al bienestar de sus comunidades y naciones.

Sin embargo, no podemos negar que aún existen obstáculos por superar y es nuestro deber acompañar a todas las mujeres en su lucha diaria por desarticular los prejuicios antiguos, los esquemas culturales patriarcales de desigualdad y jerarquización que aún subsisten encarnados entre nosotros, que impiden que puedan alcanzar su autonomía, desarrollar sus proyectos de vida y alcanzar su verdadero reconocimiento e igualdad sustantiva.

Un patente ejemplo lo constituye la violencia de género, que sigue estando presente en nuestra sociedad pese al esfuerzo realizado por los distintos actores para la concienciación sobre esta problemática.

Entendiendo que es hora de emprender su tratamiento como política de estado transversal e interdisciplinario, envié a la Legislatura Provincial el Proyecto de Declaración de Emergencia por Violencia de Género. Pedimos que en poco tiempo el Parlamento lo apruebe para poder viabilizar todas las medidas que contempla y que abarcan la temática de manera integral, con el objetivo de erradicar la violencia de género de nuestro territorio provincial.

Vamos a continuar trabajando para potenciar al máximo sus capacidades, talentos y energías, eliminando sus temores y empoderándolas frente al mundo.  

No hay barreras que puedan detenerlas, no hay obstáculos que no puedan superar; su pasión y su amor, son fuente de inspiración y admiración.

Son el motor del crecimiento, del cambio, la inclusión y la igualdad, una pieza clave y fundamental en el proceso de construcción de nuestra provincia; queremos que cada mujer chaqueña pueda cumplir sus sueños, sea feliz y se sienta realizada, abriéndose camino en todos los escenarios, en una sociedad libre de violencia y discriminaciones.

Priorizar a las mujeres, es darnos prioridad a todos. Agradezco a todas las mujeres chaqueñas por la importante tarea que desempeñan desde sus distintos lugares, porque sin su generosidad, su entrega y trabajo diario nuestra provincia no sería la misma.