La autopsia practicada al cuerpo de la pequeña de un año y medio, que fue encontrada en una cámara séptica lindante con su domicilio en la ciudad de Quitilipi y que falleciera momentos después tras su traslado al Hospital 4 de Junio, reveló que falleció a causa de “asfixia por sumersión”, pero que además presentaba “signos de abuso crónico”, según el informe preliminar efectuado por el forense al fiscal Marcelo Soto, quien tiene a su cargo la investigación que comienza a dar sus primeros pasos.
La pequeña había sido hallada el miércoles por la noche en un pozo cloacal en las inmediaciones de su casa, luego de haber sido denunciada por su madre como desaparecida.
Al ser rescatada se le realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar y se la derivó al hospital local. Fue allí que lograron reanimarla e inmediatamente la derivaron al hospital 4 de Junio de Sáenz Peña, donde finalmente falleció.
Ahora la fiscalía apunta a esclarecer lo ocurrido y determinar si la niña cayó en el pozo donde fue hallada de manera accidental o si bien pudieron haber existido otras circunstancias que incidieron en ese resultado. Para ello, en la mañana de hoy, el fiscal tiene previsto entrevistarse con el perito del Gabinete Científico que intervino en la pericial para ver si fue posible determinar esa circunstancia de acuerdo con lo que pudo observar durante la colección de pruebas en la escena que rodea al lugar donde fue encontrada la menor. O si, por el contrario, ese lugar pudo haber sido contaminado tras el hallazgo.
LO QUE DIJO EL FISCAL
También Soto tenía previsto tomarles declaración testimonial a los padres de la niña y recibir el expediente tramitado por la policía de Quitilipi para ver qué existe en el mismo y ver si surge algún dato de importancia que encamine la investigación hacia una hipótesis firme. De momento en los primeros pasos “no se descarta ninguna pista”, sostuvo el fiscal.
Inclusive, sostuvo: “Vamos a ver si con las primeras medidas podemos determinar los motivos que llevaron al fatal desenlace y si esto guarda relación con los signos de abuso que presentaba el cuerpo”.
En principio, la causa del deceso, según adelantó el fiscal y otras fuentes judiciales consultadas por este diario, es “asfixia por sumersión” ya que de acuerdo con el informe preliminar de autopsia “se habría encontrado materia fecal en su vía respiratoria”.
“Esto es un signo inequívoco de que cuando la menor cayó, ya sea por accidente o por la acción de terceros, en el interior del pozo o cámara se encontraba viva”, indicó una de las fuentes consultadas.
¿SE OCULTÓ OTRO DELITO?
Pero en este caso “estamos ante una situación compleja, ya que no solo se investiga lo ocurrido para que la niña terminara dentro del pozo, sino que la aparición de signos de abuso crónico, de vieja data, abre un panorama más amplio a la hora de determinar las causas que llevaron al deceso de la menor”, sostuvo una de las fuentes consultadas. Incluso entre las hipótesis que se manejan no se descarta hasta la posibilidad de estar frente a un caso de “homicidio criminis causa”, aunque el fiscal fue igualmente cauto al señalar: “Vamos a ver qué surge de los primeros pasos de la investigación para descartar o abonar como posible una hipótesis firme”.
Es que hasta el momento cuenta con “un informe preliminar”, ya que el dictamen de autopsia “va a demorar algunos días”, por lo que no es posible todavía hablar de “certezas plenas”.
Fuente Diario Norte