Su cuadro era complejo: un informe publicado por Infobae sostiene que la jovencita tenía lupus, una neumonía severa y estaba recientemente operada de apendicitis.

Según el portal, los padecimientos comenzaron a finales de noviembre de 2019, Nazarena, de apenas 14 años, empezó a transitar un calvario con su salud.

Empezó a faltar a la escuela, tuvo dificultades lógicas para seguir el ritmo de estudio de sus compañeros y de a poco se apagó esa imagen extrovertida, risueña y protagónica que había forjado durante su niñez en Presidencia de la Plaza.

Seis meses después del inicio de esa pesadilla con su salud, Nazarena perdió la vida, sin siquiera haber podido celebrar su fiesta de 15 en la casa de una familia amiga en el barrio Hospital Tomás Amigo.

Unas pocas horas antes de su deceso, los resultados de un hisopado detectaron que se había contagiado de coronavirus. Nazarena se convirtió así en la víctima más joven contagiada de Covid-19 en la Argentina desde la llegada de la pandemia.

Mientras tanto, su madre, Analía ‘Pelu‘ Ramírez, se encuentra en la capital chaqueña sin haberse sometido todavía a un hisopado ni encontrarse en aislamiento.

Incluso, debió transitar el drama más doloroso de su vida mientras realizaba trámites de defunción en oficinas públicas de la capital provincial. Para la familia y los amigos, la muerte de Nazarena significó un dolor profundo, como a toda Plaza.





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