Los agentes lo atraparon el domingo en una obra en construcción en Campo Largo donde el fugitivo de la Justicia supo trabajar. Vecinos que lo reconocieron dieron el alerta a la policía. Ariel Armando Vargas, fue a un kiosco a pedir agua y allí, ciudadanos que pasaron, lo vieron y alertaron a la Policía.

El femicidio ocurrió el pasado jueves en una vivienda precaria del barrio Primavera de Pampa del Infierno. Después de varios días de estar fugado, “Kiko” Vargas finalmente fue capturado y ahora se encuentra tras las rejas en la Comisaría de Campo Largo.

Luego del aviso de los vecinos, una dotación de la Comisaría Pampa del Infierno, se dirigió hasta la zona con la colaboración de personal de la Comisaría Los Frentones e Investigaciones de Charata.

Tras consultar a los residentes del barrio Sur, estos señalaron que el femicida se podría encontrar en una obra en construcción, ubicada en Alfredo Brugnoli y Los Agricultores, donde el solía trabajar y que está ubicado a unos 3 o 4 kilómetros de donde se cometió el crimen.

Cercaron el lugar y bajo un árbol, tapado con vegetación encontraron la moto en la que Vargas se movilizaba. Con esta certeza ingresaron a la obra y luego de buscar por varios minutos, lo localizaron y esposaron.

La aprehensión fue comunicada a la Fiscalía en turno, que dispuso el traslado del detenido a la Comisaría Campo Largo para su alojamiento y notificación en la causa “Supuesto Femicidio”.

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